Productos Libres de...

En FreeMet formulamos productos libres sulfatos, fosfatos, parabenos, níquel, y muchas otras sustancias contaminantes para el medioambiente y/o irritantes para la piel. Estos son algunos ingredientes comunes en la industria de la limpieza y la cosmética, a los cuales en FreeMet les decimos NO: 

INGREDIENTE

Por qué NO

BUTILHIDROXIANISOL (BHA) Y BUTILHIDROXITOLUENO (BHT)

Son antioxidantes sintéticos.

Según la Unión Europea, pueden provocar reacciones alérgicas, son posibles cangerígenos y se sospecha que puedan actuar como perturbadores endocrinos o tener efectos inmunológicos y causar hiperactividad.

2-BUTOXIETANOL

Pertenece a la categoría de "éteres de glicol", un conjunto de disolventes muy eficaces en la limpieza.

Se usan en limpiadores para la cocina, vidrios y multiusos y causan dolores de garganta, y en concentraciones altas, narcosis, edema pulmonar y daño hepático y renal severo.

CLORURO DE BENZALCONIO (AMONIO CUATERNARIO)

Se usan en desinfectantes de superficies y de verduras.

Sustancia tóxica para peces, anfibios y otros organismos que sustentan la vida en ecosistemas acuáticos. 

FORMOL

Se utilizan como conservantes para productos de limpieza.

Su uso ha sido relacionado por varios estudios con la aparición de cánceres, irritaciones, asma y problemas reproductivos. 

FOSFATOS

Se utilizan en limpiadores, detergentes y productos agrícolas.

Generan eutrofización en lagos y lagunas.

HIPOCLORITO DE SODIO (CLORO)

Se usan en desinfectantes de superficies y de verduras.

El cloro irrita la piel, los ojos y el sistema respiratorio. Los efectos van desde tos y dolor pectoral hasta retención de agua en los pulmones. Es especialmente dañino para organismos que viven en el agua y el suelo. 

METALES PESADOS (ARSÉNICO, PLOMO, MERCURIO, CADMIO).

Agentes tóxicos que si bien no se usan en productos de limpieza, se liberan en el aire y agua por actividades antrópicas como la minería, agricultura y construcción.

Pueden generar alteraciones mutagénicas, neurotóxicas y cancerígenas. En el caso del arsénico también proviene de fuentes naturales como la actividad volcánica y algunos suelos. 

NIQUEL 

Es un metal que genera reacciones alérgicas en las personas. Aproximadamente entre un 10% y 15% de la población es sensible al níquel. 

PARABENOS

Se usan como conservante por sus propiedades bactericidas y fungicidas.

El problema radica que en un estudio se encontró una relación parabenos en un alto porcentaje de mujeres con cáncer de mama. 

PERCLOROETILENO

Se utiliza en soluciones para limpieza en seco, quitamanchas y limpiadores de alfombras y tapicería, limpiadores de madera, de zapatos.

Es una neurotoxina y un posible carcinógeno. Produce mareos, irritaciones oculares y respiratorias graves, o pérdida de coordinación.

POLIETILENGLICOL (PEG)

Son derivados de hidrocarburos como el petróleo.

Como parte de su proceso podrían estar contaminados con impurezas que son perjudiciales para la salud (1,4 dioxano y óxido de etileno, entre otras). Ademas, al ser muy estables químicamente, tardan muchos años en degradarse en el medio ambiente. 

TRICLOSÁN

Muy usado en productos de higiene personal por sus propiedades antibacterianas y fungicidas; es habitual en jabones, pastas de dientes y desodorantes.

Se sospecha que interfiere con las funciones hormonales. En Europa lo han declarado “muy tóxico” para los organismos acuáticos.